1.- Han pasado cosas muy buenas durante mayo y eso me alegra muchísimo. Justo cuando pienso que las ideas se me acaban y que el fin del mundo sí debió pasar, las cosas buenas llegan y eso llena mi corazón polvoso de alegría. Es una rachita buena, me gusta pensar. Mucho trabajo en el museo y en revistas, maestría, capacitación... Muchas cosas buenas!
2.- El concierto de Lady Gaga fue esplendoroso. Trae un show bastante elaborado y eso a leguas se nota. Los pasos, los diálogos, todo todo. Tengo la sospecha de que fue Playback, puesto que es imposible que un ser humano se mueva tanto y la voz quede intacta, pero miren que por mi no hay problema, puesto que el show valió 100% la pena. La cosa más diver es que mis amigotes iban todos de hueva, por lo que se me estaba contagiando. A mi lado había dos muchachos altísimos, de esos que parecen que más bien iban por apoyo moral y que en lugar de Lady Gaga escuchaban cosas como Dilemma, Dimmu Borgir y Slayer. En fin que nada más comenzó Dance In The Dark y whoa! se pusieron a cantar bien fuerte. Me junté tantito con ellos y saltamos, bailamos y coreamos Bad Romance (ver a un altote corear "Walk walk, fashion baby / Work it / Move that bitch, Crazy" es algo INVALUABLE) y en fin, que me la pasé mejor con ellos. Como siempre, me pregunto qué onda con la gente que me rodea. A esos dos tipos altísimos: Gracias. Gracias por ser altos, fortachones y por corear fuerte, como se debe hacer en un concierto. Ahora, sigo con la reseña: excelente. Los escenarios valían muchísimo la pena, el Fame Monster era una cosa chistosa, grandiosa y todo lo que ella hace es algo grande. Yo no puedo dar el discursito de que "oooh es bien innovadora", porque esto no es la edad media. Lo que sí puedo decir es que si ella inspira algo, es esto: hacer todo en grande. Si vas a hacer algo, hazlo bien y monumental. Si vas a hacer algo y crees que va a salir mal, pues que salga mal pero en grande. Pues qué. La gente qué. Por eso me gusta Lady Gaga, porque en lugar de quedarse atrás viendo cómo acaba el mundo, mejor sale y lo termina de destrozar. Y yo quiero hacer eso, destrozar, no ser espectadora. En fin, bonito concierto, bonita compañía improvisada y buen sonido. Cinco estrellitas de cinco.
2.1.- ¡Mañana Rammstein! Me emociona porque este también pinta para ser un concierto catártico, ver esa bandera alemana de decenas de metros de alto y ver a alguien incendiándose en el escenario, discúlpame pero si eso no es una apología del mundo de "Muchas cosas apestan de mi, pero la música no es una de ellas", no sé de qué se trata todo este asunto.
2.2.- Eso sí: en Junio es Interpol y me emociono como si mi vida fuera a mejorar después de eso. Ya los había visto en festivales, pero a ellos solos -como debe ser- qué maldita emoción embarga a mi alma. ¿Mi sueño? Claro que escuchar Pioneer To The Falls, NARC y más. ¡Mucho más!
3.- La maestría va viento en popa. Todas mis materias me gustan y, a diferencia de la tan amada licenciatura (sin sarcasmo, en serio la amé), debo decir que a la hora de entregar trabajos me siento más preparada y con más temas en la mano. Qué bonito es eso. Lo malo es que mis niveles de procrastinación siguen igual, pero pues también sigo trabajando bien bajo presión. Pues oye.
4.- No quiero salar las cosas, pero gané un concursillo de cuento corto y eso me hace muy feliz. No me hace tan feliz el cuento que escribí porque lo hice un día de esos en que no está padre vivir, pero al mismo tiempo me alegra pensar que el cuento no se quedó en una carpeta olvidada. Es así como el mundo vuelve a la normalidad. En fin, que habrá presentación y no invitaré a casi nadie, por la misma razón que dije al principio. Pero alégrense por mi, es lo menos que pueden hacer (y lo mejor, también)
5.- Tengo muchso temas en la cabeza para escribir, pero como ya dije: mucho trabajo. Te extraño, blog. Pero que la razón para no escribir sea por falta de tiempo, no de ideas. No quiero estar tan jodida.
Lady Gaga - Bloody Mary
Acompáñelo con su Sufrimiento. Aquí sí le entendemos, de veras, de veritas.
jueves, mayo 26, 2011
sábado, mayo 14, 2011
Cosas que hicieron muy feliz mi infancia I
No recuerdo qué año exactamente, pero sí puedo estar segura de que eran los años noventa, con sus jeans horribles, sombreros con girasoles enormes y muchas cosas que hoy en día me provocan una nostalgia muy fuerte. A mi mamá le habían hecho un regalo en su compañía, que era toda la colección de Muzzy para aprender inglés. En esos días mi mamá no sabía mucho inglés, por lo que le recomendaron usar este método; sin embargo a ella no le latió eso de no tener maestro ni nada, así que lo guardó y se metió a clases oficiales. Por mi parte, en un día de ocio, abrí la caja y me encontré con un montón de libros y vhs, nuevecillos, olían a cajita feliz. Puse el primer vhs y recuerdo mucho mi asombro al ver los colores, la animación, las voces. Y lo que más me fascinaba: ¡Muzzy comía relojes! Ese detalle era encantador, ya no podía dejar de ver las películas. Y fue una tras otras tras otra. Había algo en toda la serie que me resultaba fascinante y divertido. Corvax, por su parte, se me hacía un malvado Über simpático y me encantaba su malicia delicada. Los segmentos de Norman para decir buenos días/buenas tardes/buenas noches, la diferencia entre fast-faster / slow-slower, todo eso era un mundo nuevo y bellísimo para mi. El otro día me preguntaron que por qué sé tanto inglés, yo siempre digo que es porque me lo enseñaron desde primero de primaria hasta mi último año en prepa; lo cierto es que Muzzy me enseñó esa base donde mi inglés se forjó. ¿Que es poco? Oye, es imposible construir el mayor de los rasca-cielos, si no tienes una base fuerte que lo soporte. Creo yo.
lunes, mayo 02, 2011
Algunas cosas que me hacen feliz estos días
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