jueves, marzo 04, 2010

Little things that I should have said and done, I just never took the time

1.- Días pesados, más porque no he podido dormir muy bien. El domingo en la noche me dio una infección estomacal hardcore y no pude dormir, mucho menos ir al servicio. Días horrible en casa con el estómago hecho un nudo de dolor. El martes en la noche intenté dormir y desperté con la sensación de que algo malo había pasado. pensé que había temblado. No vuelvo a conciliar el sueño sino hasta como las 3am, dos horas antes de levantarme para ir al servicio. El miércoles en la noche me agarra la apoplejía adolescente e intento dormir un poco. Entre el sueño y la vigilia siento que empieza a temblar y me levanto, prendo la luz y veo la lámpara quieta, mi espejo quieto, todo estático. Me acuesto más asustada y -ahora lo recuerdo- prendo la tele para que me arrulle y me duermo. Toda la noche la tele prendida. Hoy espero dormir bien.

2.- Vi a mi mejor amiga. Me dice que el mundo de posibilidades también incluye que nada pase, yo me dedico a dudar. Y ni como duda metódica, es una duda irracional, en el mismo nivel de irracionalidad que el miedo. Tomamos, ella café, yo agua mineral. Nos sentamos en una banquita y luego pasó algo. Las personas que más significan sacan tu verdadero yo. Te develas.

3.- Existe este capítulo de los simpson donde Lisa descubre la tristeza/depresión y simplemente se la pasa triste todo el capítulo. Marge trata de cambiarle el ánimo, hace su papel de madre mis-hijos-no-tienen-porqué-estar-tristes. Al final Marge le dice que está bien que esté triste. Que lo esté tanto como lo necesite, que lo disfrute casi. Lisa sonríe, Marge le dice que no tiene por qué sonreir por obligación y Lisa le dice "pero realmente quiero sonreir" (parafraseo).Hoy en la mañana estaba irremediablemente triste. Como había dejado la tele prendida, vi un poco de Frasier, el capítulo donde Frasier regresa a la práctica privada y todo le sale mal y la frustración crece. Bajo a desayunar y mi tía se queda conmigo a comer un chocolate con galletas de canela. Estábamos viendo la tele y no sé qué pasó que me empieza a contar una anécdota que tiene que ver con un chal que no era de ella, pero que lo tomó. Se empezó a reir tanto -pero tanto- que irremediablemente yo también empecé a carcajearme (lo recuerdo y me río). Ya después llegó mi taxi y me fui, ella seguía riendo. Ya en el coche me reí una última vez, mandé un mensaje y me hice bolita para dormirme todo lo que no me había dejado el mal sabor de boca de la sensación de temblor que había pasado en la noche. El taxista fue muy amable, me avisó que ya habíamos llegado, pagué y fui al servicio. Fue mi momento Marge-Lisa-Tristeza del día.

4.- Tengo una de esas pláticas con mi novio. Aquí debo repetir lo último que dije de mi mejor amiga, así que confrontar No. 2, última parte.

5.- Toda la vida se me fue en Silent Hill. Como no fui a Massive Attack por conseguir el dinero tarde, decidí invertirlo en algo mejor que sonarme los mocos con los billetes destinados a ese boleto. Así que me compré Silent Hill: Shattered Memories. Logra su cometido, presenciar todas esas cosas tan violentamente incoherentes que nos gustan a los que somos irremediablemente parte de la chaviza posmo (todos, pequeños, todos lo somos). Existen partes donde tienes que hablar con un psiquiatra y también es medio nefasto, porque todas esas preguntas influyen mucho en lo que va a seguir en el juego. Y es cierto, luego abren puertas que no, concentración de enemigos y todos esos lugares comunes que nos aterran. Ya lo acabé.

6.- Dormir.

Akira Yamaoka - Always on my mind

5 comentarios:

carlos dijo...

yo creo que significan más porque justamente sacan tu verdadero yo :)

Indio Cacama dijo...

Descansa

Indio Cacama dijo...

Descansa

Indio Cacama dijo...

Bueh, si puedes decansar dos veces...

Bob dijo...

=) para tí, elso